Dirigentes acusan falta de defensa ante Ley SBAP

Un grupo de pequeños y medianos mineros decidió organizarse al margen de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami), acusando a su dirigencia de inacción frente a la Ley 21.600, que crea el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP).
Según señala El Mercurio, así nació el Consejo Minero de la Pequeña y Mediana Minería A.G., que agrupa a cerca de 250 empresas del sector. Su objetivo es tener una voz más activa ante lo que califican como una amenaza directa a la continuidad de la actividad productiva.
Su vocera, Patricia Beiza, fue tajante: los mineros “ya venían hace rato disconformes”, pero la falta de reacción de la Sonami ante la Ley SBAP terminó por romper la confianza. “Ya no podemos permitir que nos sigan aplastando con más leyes y que nuestro presidente no alce la voz por nosotros”, señaló, en una crítica directa al titular del gremio, Jorge Riesco.
Desde la Sonami, Riesco reconoció la existencia de distintas posturas, aunque defendió la vía institucional y advirtió que 273 instalaciones mineras se ubican dentro de los 99 sitios prioritarios definidos por el Ministerio del Medio Ambiente, los que podrían afectar más de 4.200 concesiones solo en el norte del país.
La creación del nuevo gremio llega en un momento particularmente sensible para la Sonami, que en mayo reconoció —según reveló Rang Media— una falla en su seguimiento legislativo durante la tramitación de la Ley de Patentes Mineras. Ese episodio ya había evidenciado un problema de gestión interna y desconexión con las bases.
Para muchos socios, la Sonami perdió capacidad de reacción y de incidencia política. El surgimiento de este nuevo gremio parece confirmar esa percepción: la principal organización minera del país se volvió un león sin dientes frente a un Estado que avanza sin oposición en su agenda ambiental.