Plan para modernizar el mercado de capitales, pero gran parte de las reformas clave se mantienen en estudio

El regulador presentó su diagnóstico del mercado de capitales y delineó cuatro ejes estratégicos, pero la mayoría de las medidas se mantienen en etapa de evaluación, con una implementación proyectada recién para 2026.
La Comisión para el Mercado Financiero (CMF), encabezada por Solange Berstein, presentó su radiografía al mercado de capitales chileno y un plan para modernizarlo en cuatro frentes: gobierno corporativo, financiamiento de Pymes, promoción del ahorro e infraestructura y profundidad de mercado.
La propuesta contiene ideas que podrían transformar el sistema, pero que —según el propio documento— están más cerca de un listado de intenciones que de un paquete de reformas inmediatas. La mayoría quedará sujeta a estudios, mesas de trabajo o “evaluaciones” que postergan la acción real hasta, al menos, el primer semestre de 2026, cuando se publique la hoja de ruta definitiva.
En gobierno corporativo, la CMF habla de mejorar el proxy voting —el mecanismo para que un accionista delegue su voto— con representación más flexible y evaluar el uso de tecnología en juntas y procesos de votación. La digitalización completa de este sistema, que podría aumentar la participación y reducir barreras logísticas, no tiene plazo ni proyecto concreto.
En financiamiento a Pymes, el plan menciona crowdfunding, un registro de deuda consolidado y comparadores de financiamiento. Sin embargo, no se detallan cambios regulatorios ni incentivos para que estos mecanismos se masifiquen.
En promoción del ahorro, se proponen incentivos fiscales y el uso de herramientas de economía del comportamiento, pero el texto no precisa su diseño, costo ni calendario de implementación.
En infraestructura y profundidad de mercado, uno de los puntos más relevantes es el desarrollo de formadores de mercado (market makers), intermediarios que dan liquidez publicando precios de compra (bid) y venta (ask) de forma constante. Su despliegue, no obstante, queda amarrado a una mesa de trabajo con el Ministerio de Hacienda, sin fecha clara para entrar en operación.
Las definiciones que quedan para después:
- Modernización y digitalización del proxy voting.
- Inclusión de activos alternativos en portafolios institucionales y de no residentes.
- Implementación de market makers para dinamizar la liquidez bursátil.
- Regulación efectiva del crowdfunding y otras plataformas de financiamiento alternativo.
- Diseño y aplicación de incentivos fiscales para el ahorro.
- Integración de bolsas y extensión de horarios de sistemas de pago.
Mientras tanto, el mercado seguirá enfrentando los problemas que el propio diagnóstico reconoce: alta concentración, baja liquidez y barreras de acceso para empresas y ahorrantes.