Adiós definitivo en agosto del próximo año

La Comisión para el Mercado Financiero (CMF) oficializó que las tarjetas de coordenadas no desaparecerán este año, sino el 1 de agosto de 2026. El regulador publicó la Norma de Carácter General N°544, que modifica la anterior NCG N°538, postergando la entrada en vigencia de la obligación de eliminarlas y de aplicar la Autenticación Reforzada de Clientes (ARC) en operaciones sensibles.
La decisión responde a las dificultades operativas planteadas por bancos y fintech durante la consulta pública. El documento reconoce que segmentos como adultos mayores o usuarios con menor digitalización requieren más tiempo de adaptación.
- Qué cambia: hasta julio de 2026 podrán seguir usándose las tarjetas de coordenadas, pero en paralelo los emisores deben preparar mecanismos alternativos (tokens, apps, biometría).
- Qué viene: desde agosto de 2026 será obligatoria la ARC en transferencias electrónicas, enrolamiento de clientes, modificación de datos y gestión de dispositivos de confianza.
- Responsabilidad: los emisores serán responsables de los perjuicios a usuarios si no cumplen los estándares de seguridad y autenticación.
La CMF subraya que este retraso es transitorio: las tarjetas de coordenadas son consideradas obsoletas y de alto riesgo, ya descartadas en Europa, EE.UU. y buena parte de la región.
La postergación, sin embargo, deja en evidencia las contradicciones del propio regulador. La CMF tiene acceso a información detallada sobre los usuarios más expuestos —como adultos mayores y segmentos con baja digitalización—, pero no ha presentado lineamientos claros ni soluciones concretas para garantizar una transición segura. En los hechos, la autoridad reconoce que las tarjetas de coordenadas son obsoletas e inseguras, pero mantiene a miles de clientes operando con ellas por un año más, trasladando el riesgo sin resolverlo.