Boric mueve sus fichas económicas: instala a su hombre de confianza en Hacienda y abre polémica con el retorno de Álvaro García, ligado al caso Inverlink y a la fallida campaña presidencial de Carolina Tohá.

La abrupta salida de Mario Marcel del Ministerio de Hacienda sacudió al gobierno y al mercado. El Presidente Gabriel Boric nombró a Nicolás Grau, hasta ahora ministro de Economía, como nuevo jefe de la cartera más sensible de La Moneda. El economista, doctorado en la Universidad de Pensilvania y parte del gabinete desde 2022, es uno de los colaboradores más cercanos al Mandatario.
En Economía, el relevo recayó en Álvaro García, militante PPD y exministro durante los gobiernos de Frei Ruiz-Tagle y Ricardo Lagos. García había retomado notoriedad pública en los últimos meses como principal vocero del equipo económico de la fallida candidatura presidencial de Carolina Tohá y actual pareja de Marcel. El enroque, por tanto, no solo mueve nombres: simboliza un cierre de círculo político, al situar al ex vocero económico de la campaña de Tohá en reemplazo de Mario Marcel, figura clave de la conducción económica en el gobierno de Boric. Una señal que refleja las lealtades y tensiones internas en el oficialismo.
La trayectoria de García, sin embargo, no está libre de sombras. Su paso como presidente de la aseguradora Le Mans, filial del grupo Inverlink, lo vinculó directamente al mayor escándalo financiero de principios de los 2000. En 2003 fue procesado como cómplice de estafa, aunque finalmente resultó sobreseído. Aun así, uno de los episodios más recordados fue su llamado al entonces alcalde de Viña del Mar, Jorge Kaplan, para pedirle que no retirara los fondos invertidos en el holding, lo que significó una pérdida de $1.500 millones para el municipio tras el colapso del grupo.
Su regreso a La Moneda, más de dos décadas después y en medio de un escenario económico frágil, revive el fantasma del caso Inverlink y abre interrogantes sobre la memoria corta de la política chilena.